La noche era tan hermosa que se oían a las estrellas respirar. Puedo recordar noches memorables y en todos mis recuerdos aparece tu rostro. Pero cosa curiosa, nunca te he soñado, no apareces en ninguno de mis sueños, puedo nombrarte, pensar que estas ahí pero jamás te he visto. Creo que es porque no eres para mí un sueño, eres tan real, tan de carne y hueso, tan cercanamente posible que hasta ahora no he tenido la necesidad de soñarte. Hoy tengo sueño, cerrare los ojos pero se que no te veré.
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Y
U . 19.01.09 .
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