Si tengo que reír no tengo precisamente que recurrir a las cosquillas, hay muchas cosas que de sólo recordarlas me hacen reír, como una blusa debajo del colchón, las caricias de mi hermoso maní, una buena reunión con mis amigos de la univ. Pero al igual no necesitan golpearme para llorar, también tengo recuerdos que pudrían hacer rodar una lagrima sobre mi mejilla, como el oírte tan feliz por esa victoria, tú, que estas tan lejos y que te sabe tan bien. No todas las lágrimas son de dolor.
Me duele mi cuerpo, pero estoy muy de buenas, no he hablado mucho el día de hoy, creo además de en tu conversación de Buenos Días, no he dicho 3 palabras mas, pero me espera una agitada tarde, mucha familia aquí presente, mucha comida, alcohol y buenos ánimos. Y ha hablar hasta por los codos, ahora si.
Empecemos ya con la comida! Va?
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Y
U . 16.03.09 .
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